Los años no perdonan y la báscula tampoco. Solo hay que ver unas fotos del pasado (de esas que de vez en cuando te recuerda Facebook) para comprobar que físicamente cualquier tiempo pasado fue mejor. A algunas personas no les importa porque ya han tirado la toalla, a otras, sí, y mucho. Por eso sufren cuando comprueban lo que fueron y en lo que se ha quedado. No falta nunca esos ‘amigos’ que te dicen “sí que has cogido kilos eh”. Pues sí, ya lo sé, no hace falta que tú me lo digas.
Por eso, es el momento de ponerse manos a la obra y hacer ejercicio. Porque nunca es tarde para volver a ser lo que se fue. Es cierto que los tiempos cambian, pero si hay voluntad y ganas se puede hacer. Pero claro, este es el problema, que muchas veces no hay ni voluntad ni ganas. Cuesta mucho dar ese primer paso y más aún tener continuidad. Es la famosa constancia y rutina que solo factores externos nos pueden dar. Y en este caso creo que una de las mejores formas de que te pongas el chándal es contratar a un entrenador personal.
Hacer ejercicio con un entrenador personal:
Lo principal es que vas a tener una planificación personalizada: Un entrenador personal diseñará un plan de entrenamiento específico para tus objetivos y necesidades individuales.
Y como te decíamos antes no te va a falta la motivación, y es que un entrenador personal te brinda el estímulo y motivación necesarios para mantener el compromiso con tu rutina de ejercicio.
Muchas veces al hacer el ejercicio tenemos problemas o no sabemos hacerlo. Por eso, contar con este tipo de coach te va a permitir una corrección de postura y técnica. Te ayudará a realizar los ejercicios de forma correcta para evitar lesiones y maximizar los beneficios.
Y por supuesto, una supervisión constante, ya que estará atento a tu progreso y te proporcionará retroalimentación constante para ajustar tu entrenamiento según sea necesario.
Ya has visto que si quieres perder peso o incluso ganarlo, ser más fuerte o más flexible, mejorar tu condición física o simplemente mantenerte en forma, una gran opción es tener un entrenador personal al mismo se pueden tener incluso online y realizarlo a través de zoom. Que algo bueno se tenía que quedar del famoso confinamiento de la pandemia.
Esta es una de las formas de trabajar que tiene en Despierta y Entrena, un entrenador personal a domicilio en Madrid, que es él el que se desplaza hasta donde tú estés para ayudarte a convertirte en la mejor versión de ti mismo es decir que estén más saludable y con mejor condición física. Ya se sabe que muchas veces Mahoma no va a la montaña, por lo tanto ya note van a quedar excusas para no poder recuperar la forma que tuviste hace unos años.
Uno de los grandes beneficios de contar con un entrenador a domicilio es la flexibilidad horaria. Puedes acordar los horarios de entrenamiento de acuerdo a tu disponibilidad y agenda esto te permite mantener la constancia y adaptar el entrenamiento a tu estilo de vida y, por supuesto, esa atención exclusiva que te hará sentirte único haciendo deporte y ejercicio. De verdad que es algo que merece la pena, solo es cuestión de proponértelo y que alguien te eche una mano.
Hacer ejercicio con otra persona:
Ahora bien, si no queremos contar con un entrenador personal, otra buena idea es hacer el ejercicio con otra persona. En este caso vamos a notar una mayor diversión y compañía. Y es que hacer ejercicio acompañado puede hacer la sesión más entretenida y motivadora, especialmente si compartes intereses y objetivos similares.
También un mayor compromiso, ya que al ir con alguien te obliga a ser más responsable y consistente en tu rutina de entrenamiento.
Y en esto del deporte, el pique siempre es bueno, por lo que te tienes que preparar para una competencia amigable. Vamos a competir de forma sana con otra persona y eso puede motivarte a esforzarte más y superar tus propios límites.
Además, tener a alguien con quien compartir tus logros y dificultades puede ser muy reconfortante y motivador en tu camino hacia la mejora física.
En resumen, tanto hacer ejercicio con un entrenador personal como con otra persona tienen sus propios beneficios, pero ambos pueden ser muy efectivos para lograr tus objetivos y mantenerte comprometido con tu rutina de ejercicio.
